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El hombre más rico del mundo ahora tiene competencia en la carrera del transhumanismo. Aunque Elon Musk se ha ganado el respaldo de muchos conservadores y liberales, por su posición política y defensa de la libertad de expresión, tiene un lado oscuro que pocos ven. Su empresa Neuralink experimenta con seres humanos y ahora no será la única. Los mismos inversores detrás de él ahora financian a la competencia. Tal financiación a la competencia pone presión sobre Musk para que desarrolle pronto la tecnología que tanto conflicto ético produce: la fusión del hombre y la máquina.

Inversionistas de Elon Musk financian la carrera transhumanista

2024-12-30
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El hombre más rico del mundo ahora tiene competencia en la carrera del transhumanismo. Aunque Elon Musk se ha ganado el respaldo de muchos conservadores y liberales, por su posición política y defensa de la libertad de expresión, tiene un lado oscuro que pocos ven. Su empresa Neuralink experimenta con seres humanos y ahora no será la única. Los mismos inversores detrás de él ahora financian a la competencia.

Dicha financiación a la competencia pone presión sobre Musk para que desarrolle pronto la tecnología que tanto conflicto ético produce: la fusión del hombre y la máquina.

Uno de los competidores es Precision Neuroscience, una empresa que desarrolla un dispositivo para controlar teléfonos inteligentes y computadoras a través del pensamiento. Hasta el momento ha recaudado 102 millones USD mientras compite con rivales como Elon Musk para desarrollar la novedosa tecnología.



En una sola ronda de inversión, la última, la empresa con sede en Nueva York, Precision Neuroscience superó los 75 millones USD recaudados por Synchron, otra de las llamadas empresas de interfaz cerebro-computadora (BCI). Tras recibir ese monto, tiene una valoración que ronda los 500 millones USD.

Aún así es menos de los que ha recaudado Elon Musk que encabeza Neuralink. Hasta ahora ha recaudado 600 millones USD. Sin embargo, lo pone en alerta la última financiación a su rival. Sobre todo porque el capital viene por parte de sus propios inversores. A su vez expone un creciente interés de los inversores en los primeros ensayos en humanos.

Precision Neuroscience, cuyos fundadores incluyen al neurocirujano Ben Rappaport, cofundador de Neuralink, fabrica un conjunto de microelectrodos finísimos que se insertan a través de una ranura estrecha en el cráneo y se asientan sobre la superficie del cerebro. La intención es que el procedimiento sea relativamente no invasivo y ofrecerlo eventualmente a los pacientes ambulatorios.

Según uno de los patrocinados de Precision Neuroscience, Howard Morgan, presidente de B Capital: “Ahora tenemos la capacidad con los sistemas de IA para interpretar realmente (los datos del cerebro), modelarlos y hacerlo en tiempo real”.

“Hemos llegado al punto en el que ya no es demasiado pronto (para invertir), ahora estamos preparados para poder hacer cosas realmente efectivas desde el punto de vista clínico”, añadió.

Desde su Fundación en 2021, el dispositivo fabricado por Precision Neuroscience se ha utilizado en 27 pacientes. Por el momento solo se ha implementado temporalmente en personas mientras se someten a neurocirugía. No obstante, con lo logrado hasta ahora, el director ejecutivo Michael Mager afirmó que Precision Neuroscience ya había reunido más datos cerebrales que cualquier otra empresa que trabaja en el campo.

Ahora que, además de la carrera por lograr resultados, compiten por financiamiento, esto le daría a su empresa una ventaja en el aprendizaje de cómo interpretar las señales.

Neuralink ofrece algo similar, Musk ha mencionado que puso en marcha la empresa transhumanista para crear una forma de que los seres humanos compitan algún día con la inteligencia artificial avanzada. Cree que vincular el cerebro a un ordenador podría utilizarse para aumentar la memoria y la capacidad de procesamiento humanas e igualar el rendimiento de la IA.

Y cada vez son más las corporaciones dedicadas a este fin. Una de ellas es Science Corporation. El director ejecutivo de la empresa, Max Hodak, fue nada menos que presidente de Neuralink, la empresa de Elon Musk que se dedica a la experimentación para unir al hombre con la máquina: transhumanismo.

“Las principales ventajas de un implante biohíbrido son que pueden cambiar drásticamente las leyes de escalado de cuántas neuronas se pueden interactuar en comparación con cuánto daño se le hace al cerebro”, dijo al medio New Scientist Alan Mardinly, director de biología de Science Corporation.

Desde el marketing, ambas corporaciones están ofreciendo tratamiento a personas con problemas de salud severos. Por ejemplo, al momento, ambas corporaciones (Science Corporation y Neuralink) están produciendo un implante de retina utilizando electrónica más convencional que puede restaurar la visión en algunos pacientes.

Pero lo cuestionable desde la ética es que Science Corporation ha estado experimentando con los llamados enfoques “Biohíbridos”. Hodak cree que podrían proporcionar una solución a largo plazo más viable para las interfaces cerebro-máquina.

“Colocar cualquier cosa en el cerebro inevitablemente destruye cierta cantidad de tejido cerebral”, escribió en una publicación reciente en su blog. “Destruir 10.000 células para registrar de 1.000 podría estar perfectamente justificado si tienes una lesión grave y esas mil neuronas crean mucho valor, pero realmente duele como característica de escalado”.

Con el fin de compensar ese daño, la empresa ha desarrollado una estructura similar a un panal de abejas hecha de silicio que cuenta con más de 100.000 “micropocillos”. Se trata de agujeros cilíndricos de aproximadamente 15 micrómetros de profundidad. Dentro de cada uno de estos pocillos se insertan neuronas individuales. Luego de eso la matriz se puede implantar quirúrgicamente en la superficie del cerebro.

Ahora que Musk está cercano a la derecha política, es momento de recordar lo dicho por Kai Weiss: “El transhumanismo no es libertario, es una abominación”. (Ver: Transhumanism Is Not Libertarian, It’s an Abomination). En el medio American Conservative desglosa sus motivos y cómo lo que parece una buena intención, de mejorar la vida de las personas, termina por arruinarlas. Con el poder económico e influencia que tiene Musk podría ser una voz para combatirlo en lugar de motivarlo. Él sufrió lo que es tener un hijo trans… Así como eso lo alejo del progresismo, saber lo que hay detrás del transhumanismo podría ayudarlo a dar un paso más



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