Se informa que el Partico Comunista de China (PCCh) viene trabajando en una cepa letal de Ébola convertida en arma con una escalofriante tasa de mortalidad del 90%. La noticia llega después de que se sorprendiera a China dirigiendo biolaboratorios en suelo estadounidense. Como informó el medio Slay News, se descubrió en California un inquietante laboratorio vinculado al PCCh. La instalación estaba dirigida por Jiabei Zhu, un ciudadano chino prófugo de la justicia canadiense quien también era un alto funcionario de una de las empresas controladas por el Estado de China con vínculos directos con el Ejército Popular de Liberación del PCCh.
Se informa que el Partico Comunista de China (PCCh) viene trabajando en una cepa letal de Ébola convertida en arma con una escalofriante tasa de mortalidad del 90%. La noticia llega después de que se sorprendiera a China dirigiendo biolaboratorios en suelo estadounidense.
Como informó el medio Slay News, el año pasado se descubrió en California un inquietante laboratorio vinculado al PCCh. (ver: Biolaboratorio chino ilegal que realiza experimentos secretos de Covid, encontrado en California).
La oficial de cumplimiento del código Jesalyn Harper notó una manguera de jardín conectada a un edificio supuestamente abandonado en Reedley, cerca del Fresno. Entró en la estructura y encontró lo que parecía haber sido un laboratorio secreto de armas biológicas. (Ver: El Comité Selecto sobre el Partido Comunista Chino).
La instalación estaba dirigida por Jiabei Zhu, un ciudadano chino prófugo de la justicia canadiense quien también era un alto funcionario de una de las empresas controladas por el Estado de China con vínculos con el Ejército Popular de Liberación del PCCh.
Como si fuera una película de ficción, en el interior Harper encontró a ciudadanos chinos trabajando con batas blancas. El laboratorio almacenó casi mil ratones transgénicos, “diseñados genéticamente para atrapar y portas el virus COVID-19”.
El laboratorio también contenía miles de muestras de patógenos potenciales etiquetados, no etiquetados y codificados, y un congelador con etiqueta “Ébola”.
El congelador contenía bolsas selladas sin etiquetar utilizadas para almacenar materiales biológicos de alto riesgo.
Al parecer, el PCCh tiene un gran interés en el Ébola.
En un informe desclasificado, el Servicio de Inteligencia de Seguridad de Canadá reveló que la Dra. Qiu Xiangguo, mientras trabajaba en el único laboratorio P-4 de Canadá en Winnipeng, envió sin autorización a China la secuencia genética del Ébola. (Ver: Mentiras y escándalo: cómo dos científicos deshonestos en un laboratorio de alta seguridad desencadenaron una calamidad de seguridad nacional).
También trabajaba para el Instituto de Virología de Wuhan (WIV).
La Dra. Qiu envió muestras autorizadas de diferentes cepas del virus del Ébola a las instalaciones. También envió al laboratorio muestras del virus Nipah, otro patógeno mortal transmitido por animales. (Ver: Un científico canadiense envió virus mortales al laboratorio de Wuhan meses antes de que la RCMP pidiera investigar).
La Dra. Qiu, que había trabajado en una cura para el Ébola, también colaboraba con la Academia de Ciencias Médicas Militares de China (AMMS), institución de investigación médica de más alto nivel perteneciente al Ejército Popular de Liberación del PCCh.
Qiu y su esposo fueron escoltados fuera del laboratorio de Winnipeg en julio de 2019. Después de ser despedidos en enero de 2021, Qiu y su esposo se mudaron a China, donde trabajan bajo seudónimos.
Según un documento publicado por una compañía farmacéutica china en marzo de 2023, se reveló que la Dra. Qiu estaba trabajando en el Ébola. (Ver: El Congreso de los Estados Unidos solicita una sesión informativa de inteligencia sobre los científicos despedidos de Winnipeg).
El Ébola tiene una alta tasa de mortalidad, pero no es altamente transmisible de persona a persona. Sin embargo, los experimentos con el virus pretenden hacer que el virus mortal se propague entre los humanos.
En una declaración al Instituto Gatestone, el Dr. Sean Lin, exdirector de laboratorio de la rama de enfermedades virales del Instituto de Investigación del Ejército Walter Reed, señaló:
“En general, el Ébola no sobrevive bien fuera de sus huéspedes y no favorece la transmisión por aerosoles. No es fácil convertir el Ébola en un arma biológica funcional”.
No obstante, el Dr. Lin advierte que China puede hacer que la enfermedad sea altamente contagiosa. Después de todo, el Instituto de Virología de Wuhan es la capital mundial de ganancia de funciones.
Nipah es “altamente patógeno”, señala Lin. “Es alarmante que los laboratorios de virología chinos hayan colaborado con EcoHealth Alliance para recolectar muestras de infección por Nipah en Malasia y la India”.
El gobierno canadiense también ha estado facilitando estos experimentos.
Charles Burton, miembro de alto rango de Synopsis y exdiplomático canadiense destinado en Beijing, mencionó a Gladstone:
“Canadá permitió a los científicos chinos manipular y transferir a China algunos de los patógenos más mortales conocidos por la humanidad”.
Brandon Weichert, autor de Biohacked: China’s Race to Control Life, dijo a la publicación:
“El ejército de China ha hablado abiertamente sobre convertir en arma la herramienta de edición genética CRISPR-Cas9 y realizar investigaciones de ganancia de función sobre enfermedades como puerta trasera para convertirlas en armas”.
“El Instituto de Virología de Wuhan utilizó el COVID-19 como arma, pero eso fue simplemente una prueba de concepto”.
“Hay enfermedades más desagradables, como el Ébola y el Nipah, que, mediante experimentos de ganancia de función, pueden convertirse en plagas verdaderamente virulentas. Por lo tanto, con algunas modificaciones en el laboratorio, el Ébola y el Nipah pueden ser las herramientas de China para exterminar al pueblo estadounidense”.
25 años atrás, el general Chi Haotian, ministro de Defensa de China y vicepresidente de la Comisión Militar Central del Partico Comunista, supuestamente pronunció un discurso secreto defendiendo el exterminio de los ciudadanos estadounidenses. (Ver: Discurso interno de Chi Haotian, ex Ministro de Defensa del Partido Comunista de China ----- ¿Usar armas biológicas para "despejar la zona"?).
Habló de utilizar una enfermedad mortal para limpiar los vastos espacios de América del Norte para que el pueblo chino pudiera establecerse en las zonas que quedaron deshabitadas.
“Es realmente brutal matar a cien o doscientos millones de estadounidenses”, afirmó.
“Pero ese es el único camino que asegurará un siglo chino, un siglo en el que el Partido Comunista lidere el mundo”, añadió el general.
Richard Fisher, del Centro Internacional de Evaluación y Estrategia, dijo a Gatestone:
“El problema con el informe del discurso de Chi Haotian es que no se puede verificar. Cuando se reveló en 2005, parecía fantástico que China desataría una guerra biológica contra Estados Unidos para masacrar a su población y allanar el camino para una invasión, ocupación y explotación del Partido Comunista”.
Desde entonces, los últimos acontecimientos han dado credibilidad al informe.
Entre otras cosas, el SARS-CoV-2, el patógeno que causa el COVID-19, fue con certeza diseñado en el Instituto Wuhan, y Xi Jinping luego propagó deliberadamente esta enfermedad de China una vez que escapó de ese laboratorio.
Por lo tanto, “el discurso de Chi Haotian parece más bien una advertencia real”.
Como señala Fisher, el PCCh aparentemente es capaz de cometer una malevolencia insondable.
Los artículos incautados en el laboratorio de Reedley sugieren fuertemente que el régimen chino se está preparando para propagar enfermedades en Estados Unidos.
“Este laboratorio kamikaze (inseguro, mal contenido, improvisado, que contiene un par de docenas de patógenos cerca de un centro de población) no puede ser único”, dijo Weichert, también analista de seguridad nacional de The National Interest.
“Creo que es parte de una gran operación militar china para propagar enfermedades entre la población estadounidense”.
El problema con el COVID-19 es que también infectó y mató a chinos. Sin embargo, es casi seguro que el ejército chino esté trabajando en patógenos dirigidos a grupos particulares.
La Universidad de Defensa Nacional de China, en la edición de 2017 de la autorizada Ciencia de Estrategia Militar, mencionó un nuevo tipo de guerra bilógica de “ataques genéticos étnicos específicos”. (Ver: Armando la biotecnología: cómo el ejército chino se está preparando para un 'nuevo dominio de guerra').