Los escolares de hasta 18 años en Inglaterra no recibirían lecciones sobre la “identidad de género” en las escuelas, esto según las propuestas gubernamentales publicadas el jueves, en medio de una creciente preocupación en el Reino Unido y otros lugares sobre las cuestiones transgénero. La medida sigue a una revisión histórica que el mes pasado instó a “extrema precaución” al recetar tratamientos hormonales a jóvenes que luchan con trastornos de identidad de género. Para la secretaria de Educación, Gillian Keegan, las medidas tendrán como objetivo garantizar que los niños "no estén expuestos a demasiadas cosas tan pronto, quitándoles la inocencia de la infancia".
Los escolares de hasta 18 años en Inglaterra no recibirían lecciones sobre la “identidad de género” en las escuelas, esto según las propuestas gubernamentales publicadas el jueves, en medio de una creciente preocupación en el Reino Unido y otros lugares sobre las cuestiones transgénero. (Ver: Reino Unido quiere limitar la enseñanza de la identidad de género en escuelas).
La medida sigue a una revisión histórica que el mes pasado instó a “extrema precaución” al recetar tratamientos hormonales a jóvenes que luchan con trastornos de identidad de género.
El primer servicio de Desarrollo de identidad de género para niños de Inglaterra, dirigido por Tavistock and Portman NHS Trust, cerró en marzo después de años de críticas por haber prescrito demasiado rápido un tratamiento para bloquear la pubertad.
Según las propuestas contenidas en el nuevo borrador de orientación, la “controvertida teoría de la identidad de género” no se ensenaría a alumnos de ninguna edad, según un comunicado del Departamento de Educación.
La secretaria de Educación, Gillian Keegan, dijo que las medidas tendrán como objetivo garantizar que los niños "no estén expuestos a demasiadas cosas tan pronto, quitándoles la inocencia de la infancia".
“Es por eso que esta guía actualizada incluye límites de edad claros para la enseñanza del contenido más sensible y especifica que el tema controvertido de la identidad de género no debe enseñarse”, escribió Gillian en el documento de orientación.
Desde 2020, la educación sexual es obligatoria en las escuelas secundarias de Inglaterra, en las que se imparte educación a niños a partir de los 11 años.
Harriet Cass, la pediatra que dirigió la revisión de cuatro años de los servicios de identidad de género, calificó la “toxicidad” del debate como “excepcional”.
“En la escuela secundaria (de 11 a 18 años) los alumnos aprenderán acerca de las características legalmente ‘protegidas’, como la orientación sexual y la reasignación de género”, señala el comunicado del departamento de Educación.
“Pero la guía actualizada es clara en cuanto a que las escuelas no deberían enseñar sobre el concepto de identidad de género”.
Las propuestas también prohibirán la educación sexual para niños menores de nueve años debido a las preocupaciones sobre algunos de los materiales que se utilizan en las escuelas.
“Los padres confían, con razón, en que cuando envían a sus hijos a la escuela, se les mantendrá seguros y no estarán expuestos a contenidos perturbadores que sean inapropiados para su edad”, manifestó el primer ministro Rishi Sunak en el comunicado.
“Es por eso que me horroricé al escuchar informes de que esto sucedió en nuestras aulas el año pasado”, añadió.
La Asociación Nacional de Directores de Escuelas (NAHT, siglas en inglés) cuestionó si las propuestas del gobierno protegerían eficazmente a los niños dado el acceso generalizado a los teléfonos inteligentes.
“No podemos ignorar el hecho de que algunos niños y jóvenes ya están accediendo a información de diferentes fuentes fuera de la escuela”, afirmó el secretario del sindicato, Paul Whiteman.
“Esto puede generar preguntas que requieren un manejo cuidadoso por parte de profesionales capacitados”.
La nueva guía también incluye contenido adicional sobre la prevención del suicidio y los riesgos de ver contenido que promueva la autolesión en línea.
La magnitud del material disponible en línea quedó de manifiesto en el Reino Unido con la muerte en 2017 de la colegiala de 14 años, Molly Russell. (Ver: Adolescente del Reino Unido murió después de los “efectos negativos del contenido en línea”: forense).
Un forense dictaminó que había muerto por un acto de autolesión mientras sufría los “efectos negativos del contenido en línea”, lo que llevó a su familia a organizar una campaña para resaltar los peligros de las redes sociales.
Su padre, lan Russell, criticó el 2023 la respuesta de las empresas de redes sociales a un informe destinado a prevenir futuras tragedias como “decepcionante y nada sorprendente”.
Las nuevas propuestas del gobierno estarán sujetas a una consulta de nueve semanas y serán obligatorias una vez finalizadas.